¿Cómo invertir en fondos de inversión?

Te enseñaremos los conceptos básicos sobre cómo invertir en fondos de inversión.

Si no eres un experto en el mundo de los productos financieros de ahorro, invertir en fondos de inversión es una opción ideal que puede ayudarte a generar una buena rentabilidad para tus ahorros.

 

Otras de sus ventajas, es que los fondos de inversión poseen diversos perfiles según las necesidades e intereses de los clientes. En este sentido, podrás elegir fondos con perfiles más conservadores que tiendan menos al riesgo –pero con una menor rentabilidad- o fondos con un riesgo potencial mayor, que podrá brindarnos mayores beneficios.

 

Lo mejor de invertir en fondos de inversión es que existe una entidad gestora que se dedica a sacar el máximo provecho a nuestros ahorros. Estos se sumarán a de otros partícipes, ya que los fondos son un instrumento de inversión colectiva que deriva los riesgos entre multitud de clientes.

 

 

1. Encuentra el mejor fondo de inversión según tu perfil

 

Existen diversos tipos de fondos de inversión que pueden resultar más atractivos para uno u otro perfil. Podremos encontrar fondos de renta fija, renta variable, monetarios, mobiliarios, de retorno absoluto, de acumulación o reparto.

 

Otra categorización coloca a los fondos de inversión entre fondos de gestión pasiva y gestión activa.

 

Como hemos comentado existe un determinado fondo de inversión para cada perfil. Para ello, es posible disponer de un folleto pormenorizado que te indique las diferentes políticas de inversión; el tipo de activos en que se invierte a través de renta fija y variable, mixta, entre otras; y las evoluciones de los fondos junto a posibles comisiones que pueden cobrarnos las entidades por traslado o apertura.

 

Debes tener presente la rentabilidad histórica del fondo de inversión, que nos mostrará una medición del fondo a lo largo del tiempo y que podremos comparar con la rentabilidad de su benchmark.

 

Es importante hacer la comparativa con fondos que tengan la misma política de inversión y tener presente que rentabilidades pasadas pueden no garantizar las que se den en un futuro histórico.

 

 

2. Contrata tu fondo de inversión

 

Una vez que hayas definido qué fondo se adecúa más a tu perfil es posible contratarlo usando una entidad comercializadora del fondo en cuestión. La contratación de un fondo de inversión es más fácil de lo crees y los gestores de la entidad estarán más que dispuestos a servirte de orientación.

 

La contratación puede realizarse de forma presencial en la entidad bancaria o a través internet de forma sencilla. Para contratar el fondo a través de la entidad es necesario ser previamente cliente del banco.

 

Contratar un fondo a través de internet es un trámite ágil que no debería tomarte más de 10 minutos. Es recomendable conocer bien todas las características del fondo, los activos, y qué rentabilidad de ahorro puede aportarnos. También es importante conocer si existen comisiones o pagos que puedan sumarse al saldo inicial.

 

Los beneficios en la fiscalidad de los fondos es otra de las ventajas que podemos obtener con su contratación.

 

 

3. Controla tu inversión

 

Si eres un neófito en el manejo de productos de inversión, una de las principales ventajas que poseen los fondos de inversión es que apenas tendrás que estar pendiente de la evolución de tus activos.

 

A la hora de contratar uno de estos fondos, es la gestora la que se encarga de elaborar informes periódicos para que puedas seguir la citada evolución. No es necesario estar pendiente de forma diaria, pero sí podrás seguirla de forma mensual, trimestral o semestral para estar al día de tu inversión.

 

Como recomendación, es importante contar con un plan de ahorro que dedique aportaciones periódicas a tu fondo de inversión. De esta forma se reduce la incertidumbre en el mejor momento para ahorrar, pues las fluctuaciones del mercado a corto plazo pueden resultar más positivas que entrando en diferentes momentos.

 

De igual modo, el ahorro periódico generará un hábito que puede ser beneficioso para nuestras finanzas. Dedicar un pequeño porcentaje de nuestros ahorros a este cometido hará que puedas ver crecer tus ahorros a lo largo del tiempo de forma sencilla y natural.

 

Diversificar y repartir nuestros ahorros en diferentes fondos de inversión también nos ayudará a reforzar nuestros ahorros ya que se reduce el riesgo de pérdida económica en el caso de que uno de los fondos no rindiera al alza.